“LOS TOROS”, CARLOS BRAVO M.
- CARLOS BRAVO M. 27-3-2025
“LOS TOROS”
La tauromaquia, que significa luchar con un toro y que desde hace siglos es un arte ya sea que la lidia se haga a pie o a caballo lo que se conoce como rejoneo, data desde la edad de bronce, habiéndose practicado por los celtas, tartésicos, griegos, cartagineses y romanos, asentándose en la peniínsula ibérica y floreciendo como arte en España, aunque en aquellas épocas, eran reinos, entre ellos Castilla, León, Aragón, Asturias y Galicia.
El arte de la lidia se va consolidando con reglas, la crianza de una raza especial de toros que al paso de los siglos, se han modificado genéticamente para sólo servir para el toreo y no ser útil para consumo humano.
En 1385 se crea la escuela de tauromáquia en Sevilla y es en 1554 en que se acuña el concepto de la lidia tal como la conocemos hoy día y que se representa en la corrida de toros.
En el siglo XVII se crea la Plaza Mayor de Madrid y un siglo después se profersionalizan los toreros.
En América y en especial en México, la fiesta brava llega con la conquista, trayéndose los primeros toros de lidia del reinado de Aragón y empezando a celebrarse corridas de toros en las primeras haciendas de peninsulares y criollos y poco después, llegan toros al Perú con todo y la fiesta.
Dicho arte, se extendió a diversos países como Portugal, Francia, México, Ecuador, Perú y Venezuela, En China, Filipinas y Estados Unidos, se han celebrado corridas de toros ocasionalmente y además de los toreros profesionales, siempre hay espontaneos que se lanzan a la arena a dar unos capotazos, además de los toreros cómicos y los llamados tancredos.
Pero la tauromaquia no sólo abarca el arte de la lidia, sino toda una historia centenaria, tradiciones, fiestas, festejos populares y leyendas de grandes toros y toreros épicos. Va desde la cría del toro en ganaderías especializadas, la confección del traje de luces al igual que los de banderilleros picadores y mozos, el diseño de los capotes, las bancerillas las muletas y guarnicionería, y siendo un arte, engloba las demás artes siendo representada en la pintura, la escultura, la literatura, la música popular, la ópera y el cine.
Nuestra Monumental Plaza México, es también muy antigua y además es la más grande del mundo y junto a la de Madrid, son las únicas donde los grandes toreros toman la alternativa. Por cierto, en Aguascalientes existe también una escuela de toreros.
Por todo lo anterior y por la afición que existe en nuestro país, se me hace una estupidez populista, la prohibición de las corridas de toros en la monumental , más habiendo otros asuntos prioritarios a resolver en la capital y el país, en lugar de quitarles la fuente de empleo a miles de personas que viven de la fiesta brava.
El toreo no es una graciosa huida, sino una apasionada entrega. Pepe Alameda.